miércoles, 28 de abril de 2010

Poema Inacabado





Me ronda la idea de hacerte redondo
a besos
lamerte las aristas
con esta lengua de gata arisca
que ronronea al calor de un ron
y entre tus manos.

Me gusta la idea de degustarte
a tientas,
de tentarte todos los sentidos ciegos:

el tacto rugoso de un pezón

el gusto salado de otros labios


Me turba la idea de tumbarte
y follarte en los próximos folios
de este poema,

pero sinceramente,

prefiero acariciar tu piel que cualquier tecla
y creo que es buena excusa para no terminar un ... po...e...

martes, 20 de abril de 2010

I Love My Boy




Desde la ventana del tren
veo a una niña-mujer
sentada en un banco.

Su novio,
supongo,
le increpa desde
arriba, le grita,
se le acerca demasiado para
decirle algo
al oído
y ella aprieta con fuerza
los ojos,
los labios
y los bordes de su minifalda.

Yo observo impotente
como sus pechos adolescentes
se agitan por el llanto,
bajo una camiseta que reza
"I LOVE MY BOY"

Me cago en la(s) moda(s)

lunes, 19 de abril de 2010

Pasas - Milagro



En la mesa de al lado
unas mujeres de unos 50,
bien vestidas,
hablan de las bayas goji.

Dicen :

"Son estupendas para el colesterol"
"ideales contra la fatiga"

"las tomo con yogur"

y cosas por el estilo


Dicen:

"Son como uvas pasas
pero muy rojas"


Como la sangre, pienso


Y me pregunto, si hablaran
alguna vez del
Tíbet
sin nombrar las putas
pasas
milagro.


domingo, 18 de abril de 2010

Ley de Protección de Datos

Quiero ejercitar mi derecho de acceso,
rectificación,
cancelación
y oposición
a los datos que contiene este fichero.

Estoy planteandome seriamente
demandar a mi memoria
por incumplimiento de contrato.

viernes, 16 de abril de 2010

Biografía no autorizada

Tengo dos años y medio,
mi hermana llega
a casa, en el capazo
de la compra.
Yo pienso que esta hecha de golosina.

Cinco años y toda
la seguridad del mundo
se esconde en el dedo
meñique
de mi hermano mayor.

Con siete
los Reyes
me traen el castillo de
Sheila,
en vez de trampas tiene nubes rosas.
Me niego a pedirles nada más,
desde entonces.

Ocho.
Aprendo a cantar
coplas de la Piqué
en el parking del Pryca
Mientras,
mis padres compran
y mi hermana
conoce la vergüenza.

Apuesto,
con nueve,
en el hipódromo de Lasarte
cada Agosto.
5.000 pesetas y
triples gemelas, en un bolso
azul
con lacito de brillantes.

Llego un día de la escuela,
y mi tía nos espera para llevarnos.
Mi madre disimula mal.
Mi amona ...
Tengo once años y aprovecho
una caída en el parque,
para llorar la rabia
de su muerte.

Trece años y malas notas
en química.
Apruebo para que me compren
un tocadiscos.
El crujido de los vinilos
sueña distinto
en mi cuarto. Hace más
cosquillas en la nuca.

Tengo 14 años.
Una aglomeración de gente
me arranca la infancia.

De cuajo.


Ya no soporto que nadie me toque.

sábado, 10 de abril de 2010

Tu peor influencia

Supongamos,
que el orden
estuvo una vez
de mi lado,
aunque fuera el alfabético y
para desordenarte la vida
un poco
o lo suficiente
para querer seguir
a mi lado desde entonces.

No fue el des-tino
sino mi bendita manía
de llegar tarde
a todas partes
pero justo a tiempo
de cruzarnos los caminos
y todos los cables que chispean
a los 18.

Estallaron nuestras risas de confetti
cada jueves
con Satán
sirviendo copas,
quemando penas con vodka
y tu minifalda de cuero.

Quisimos reirnos del miedo,
que la vida
sola
ya acojona bastante.

Aprendimos juntas que
las furgonetas blancas
esconden secretos a voces
y momentos de locura
transitoria. Que los
perros a veces
muerden, pero
también se comen
los móviles, y dejan a su dueño
con el rabo
entre otras piernas.

Y me da igual lo que digan,
si quedamos
Una semana
y cinco días
sueltos, en un año
porque

me enseñaste
que las grandes historias
no necesitan de mucho
tiempo para ser contadas
simplemente necesitan
ser buenas,
como la nuestra.





Supongo que es mi forma de decir feliz cumpleaños y gracias por seguir ahí. Sabes que siempre seré tu peor influencia y tú lo mejor que encontré en la facultad de periodismo.

La primera vez

Como la primera vez,
en la que no hay recuerdo
que contamine el presente.

Quítame el precinto
de estos labios
antes de gastarlos en mis años mozos
(pocos años
demasiados mozos).


Antes de que Zaragoza sea
el recuerdo de una habitación
llena de acentos,
adentro...justo ahí..sí
en el centro del pecho.

Bésame estos pies
antes de que taconeen
por Malasaña
al ritmo de su voz.
Antes de que suenen sus palmas por bulerías
en mi culo,
escondidos
tras cualquier rincón de la casa de mi hermano.
Antes de correrme de placer
y culpa.


Antes de escribir coplillas en un OCB
y fumarnos
y ladrarnos como amantes
y follarnos como perros,
huyendo del invierno que no se va
por más que me plante primaveras
al sur de mi ombligo.

Cuando no me teñía
el pelo
ni la pena.

Ven entonces
y piérdete entre mis pliegues
de mieles
y siémbrame tus flores blancas
al final de mi espalda,
que vamos a rebañarnos
el vicio acumulado
de pensarnos con las manos.

Dime el primer guapa,
de esos que significan
"te quiero",
de esos que
todavía hoy,
me desarman.